FLAUTAS DULCES

 

 

Existen flautas dulces de menos de 15 centímetros de longitud, hasta modelos de más de 2 metros y medio. Las más difundidas y conocidas -sin embargo- son la flauta dulce soprano, instrumento común en las escuelas para iniciación musical, y la flauta dulce contralto o también llamada a veces flauta dulce alto. Todas tienen una tesitura de dos octavas y media, y en general son instrumentos afinados en Do o en Fa:

 

Origen del Instrumento
 
En el Siglo XVII se produjeron varios cambios en la construcción del instrumento, resultando en lo que se conoce como "flauta dulce" . Las innovaciones permitieron esta marca en una tesitura de dos octavas y media cromáticas, y la obtención de un timbre más "dulce" que los modelos anteriores. Durante el Siglo XVII, en forma algo confusa, el instrumento es a menudo referenciado simplemente como "Flauta" (Flauto en italiano), mientras que la flauta travesera es llamada "Traverso". Para esta flauta dulce fue que Bach escribió su 4º Concierto brandenburgués en Sol mayor, a pesar de que Thurston Dart sugirió erróneamente que fue escrito para flageolets.
El compositor Johann Sebastian Bach empleó flautas dulces en la instrumentación de diversos conciertos y cantatas.
Realmente, Bach escribió esta obra para dos "flauti d'echo", o flautas de eco, un ejemplo de las cuales sobrevive hasta hoy en Leipzig. Consiste en dos flautas dulces en fa, conectadas por pestañas de cuero, de forma que una de ellas se usa para tocar "forte" , la otra "piano".
Antonio Vivaldi escribió tres conciertos para "flautino", un instrumento que se pensaba correspondía al píccolo. Actualmente se acepta que realmente, se trataba de la flauta dulce sopranino. Sin embargo en uno de los manuscritos de estos conciertos se puede leer la indicación "strumenti alla quarta bassa" , hecho que ha llevado a formular la hipótesis que en realidad el instrumento pensado por Vivaldi para estos conciertos era la flauta dulce soprano.Esta hipótesis está avalada por la muy escasa presencia de la flauta dulce sopranino en el barroco tardío y varias referencias al "flauto piccolo" o "flautino" indicando la flauta soprano en re o en do.
La flauta dulce renació a principios del Siglo XX, gracias al interés de los intérpretes de música renacentista y barroca en utilizar los instrumentos originales de aquellas épocas. Uno de los principales impulsores de su uso fue Arnold Dolmetsch en el Reino Unido, quien junto a otros estudiosos e intérpretes en Alemania ayudó a difundir el instrumento.
A mediados del Siglo XX, varios fabricantes fueron capaces de construir flautas dulces en bakelita y derivados plásticos, produciendo un instrumento barato y accesible. A causa de esto, a las facilidades que da el plástico en la cabeza de la flauta, para tocar soportando gran caudal de aire para principiantes, y a la creación de la digitación alemana siendo más fáciles de tocar, la fusión de flautas enterizas de plástico y digitación alemana, este tipo de flautas dulces comenzaron a ser muy populares a nivel escolar por ser más fáciles de tocar y tener un bajo costo, considerando además su relativamente sencilla técnica inicial, y el hecho de no ser instrumentos tan estridentes en manos musicalmente no experimentadas.

 

 

Partes de la Flauta dulce:

 

LA POSICIÓN DEL CUERPO:

Adquirir una buena posición (de pie o sentado) es condición indispensable para la correcta ejecución de la flauta. El cuerpo y la cabeza deben quedar normalmente erguidos, sin inclinarse hacia delante y con los codos ligeramente separados del cuerpo. La flauta debe ser sostenida en un ángulo de 45 aproximadamente con la vertical del cuerpo a fin de que el aire entre en forma directa y las manos puedan estar cómodamente colocadas. Los hombros y el cuello sin tensiones. La flauta debe agarrada cómodamente y en sentido oblicuo.

 

Respiración

El control de la respiración es la base de la buena emisión y calidad del sonido. Esta debe ser tranquila y libre de toda tensión sobre los hombros y el cuello. Existen diferentes ejercicios para lograr una buena respiración.

 

Soplado y forma de ataque

La embocadura de la flauta se debe apoyar en los labios sin apretarlos. Tiene que evitarse el roce con los dientes y el escape de aire o sonidos distintos a los del instrumento.
Se atacará cada nota con decisión, pero suavemente, pronunciando cada sonido con la sílaba DU o TU. La consonante provoca el toque de lengua y la vocal ayuda a colocar correctamente los labios.
Es fundamental el golpe de lengua, que consiste en llevar la lengua hacia el paladar y luego, al producir el sonido, colocarla contra los dientes pronunciando la silaba DU o TU.
Para lograr una buena interpretación, se hace necesaria la sincronización entre el movimiento de los dedos y la emisión del aire.
La flauta dulce se sostiene en posición vertical, con la mano izquierda más cercana a la embocadura. Una técnica correcta implica atender a la emisión del sonido, su articulación, y la digitación que permite generar las distintas notas.
 

Emisión del sonido

La emisión es de carácter "natural", evitando la idea de "soplar". La embocadura, del instrumento es un "bloque" (A) dentro del cual un canal de viento (B) dirige el aire directamente contra un borde afilado o lengüeta (C), que transmite su vibración de aire hacia la columna de aire dentro de la flauta. Por este motivo es relativamente sencillo producir sonidos, aunque la posición de la boca produce variaciones notables en la calidad y timbre del instrumento.